Esta inocente pregunta forma parte del famoso cuestionario de Marcel Proust: 30 preguntas para ayudar a conocer mejor a alguien. La versión del 1900 de los actuales test de personalidad en facebook.
A este tipo de preguntas o bien contestas rápido y sin pensar (y reconozcámoslo, seguro que luego te arrepientes un poco de los pocos matices de la respuesta), o bien empiezas a reflexionar y te nublas y te es absolutamente imposible contestar a la dichosa preguntita. ¿Mi canción favorita? Y cómo se supone que puedo elegir solo una y dejar fuera de la lista a tantas otras… y así hasta el infinito.
Yo lo he vivido en primera línea de combate: en todas y cada una de las ferias a las que en estos más de 10 años cortando, afilando, peinando y vendiendo criaturitas de lápiz: las sonrisas detrás del mostrador, la alegría de recuperar la infancia iniciales… ¡y el desasosiego de tener que quedarse SOLO con un color! ¿A qué desalmado se le ocurre hacer eso? En la gran mayoría de los casos, después de mucho rato deliberando, la opción elegida es la primera que se barajó, otras veces acaban combinando dos finalistas, etc. La cuestión es que llega un momento en que tener que elegir un color deja de ser placentero porque los quisieras TODOS, y por eso ahora estamos lanzando los PACKS de 5 pendientes de distintos colores, precombinados para que todas las opciones que generan funcionen a las mil maravillas y esa tensión de tener que elegir, al menos en este aspecto de la vida, desaparezca.
Porque seguro que una vez leas lo que respondió Marcel Proust en su cuestionario a la pregunta nº11, ¿cuál es tu color favorito?, ya no podrás concebir otra respuesta mejor:
«Mi color favorito es la combinación de todos»